El robo de datos y la vigilancia en Internet son temas que siempre causan titulares. Los expertos en ciberseguridad señalan que ninguna empresa es demasiado pequeña para los ciberataques. Pero también, los individuos privados se enfrentan constantemente a preguntas sobre ciberseguridad y deben proteger cada vez más sus datos personales en Internet y en sus dispositivos móviles.
En uno de sus últimos podcasts de Perspectiva Internacional, los presentadores Stefan Daniel Tàborek y Sebastian Sauerborn invitan a hablar sobre
cómo se puede lograr esto y qué desafíos enfrentan tanto las personas privadas como los empresarios en lo que respecta a la protección de datos y la ciberseguridad.
Ciberseguridad y privacidad: dos cosas diferentes
En la era digital, el mundo de la información está abierto para nosotros casi en todas partes y en todo momento. Sin embargo, al participar en él, ya sea a través del navegador de la PC, el móvil o incluso dispositivos domésticos inteligentes, también somos accesibles y supervisables desde el exterior. Por un lado, los hackers utilizan esto para ciberataques; por otro lado, el acceso digital permite la supervisión del individuo por parte del Estado y, no menos importante, por las grandes empresas tecnológicas y otras empresas comerciales que utilizan datos privados para sus fines.
Aunque te sientas protegido en términos de ciberseguridad y bien preparado para posibles riesgos como malware y correos electrónicos de phishing, eso no significa automáticamente que tu privacidad esté protegida. Un buen ejemplo de esto es el software antivirus. Aunque contribuye a la ciberseguridad, también recopila datos privados. Esto significa que, aunque se garantiza la seguridad, la privacidad no lo está. Si realmente deseas asegurarte de que tus datos privados no lleguen a manos de terceros no deseados, debes tomar medidas especiales. Estas generalmente comienzan con el teléfono inteligente.
El “espía en el bolsillo del pantalón”
Los teléfonos inteligentes convencionales ofrecen naturalmente la capacidad de acceder a los datos del propietario. Si realmente deseas asegurarte de que nadie puede ver tus datos, necesitas un teléfono con un sistema operativo de privacidad especial. Solo este proporciona las condiciones básicas para un uso verdaderamente privado del teléfono.
Un ejemplo de que los teléfonos convencionales pueden proporcionar datos en cualquier momento son los llamados giroscopios. Un giroscopio, también conocido como girosensor, es un sensor de orientación. Reacciona a los cambios de orientación, movimientos giratorios y aceleraciones. Con él, se pueden determinar de manera precisa los cambios de dirección. Por ejemplo, si caminas por un túnel y se interrumpe la señal GPS, el giroscopio toma el control y proporciona la información faltante. En juegos móviles como Pokémon GO, esto puede proporcionar diversión al extender las posibilidades de control, pero también hace que tu teléfono privado sea rastreable en cualquier momento.